Nuestros duelos, nuestros puntos en común

He cumplido una semana compartiendo con jóvenes activistas centroamericanos, y más allá de ser jóvenes, integrar espacios que promueven y defienden Derechos Humanos, tenemos diversidad de duelos en común que nos dicen algo sobre el porqué estamos organizadas/os. 

Nuestras naciones saben lo que es vivir una guerra, y reflexionamos ¿pudieron evitarse? ¿qué se ganó? ¿qué se perdió? ¿valieron la pena? ¿qué ha cambiado?  Muchos/as no las vivimos, otras/os sí, pero aunque no hayamos vivido esas etapas, nuestros familiares se encargaron de transferirnos no solo las historias de cómo sobrevivieron esas guerras, también nos han transferido sus duelos. 

Vivimos en países donde “derecha” e “izquierda” viven en pugna por el control absoluto del poder, pero que por debajo de la mesa realizan pactos que favorecen únicamente sus intereses. 

Hemos crecido en sociedades donde problemáticas de salud, educación, seguridad ciudadana o la violencia machista, no son temas de prioridad en la agenda de servidores públicos, pero sí lo son tratados de libre comercio, donde a potencias mundiales que a lo largo de la historia han saqueado nuestras riquezas, se les otorga el pase libre para que sigan enriqueciéndose a costillas de “los países en vía de desarrollo”.

Hemos sido víctimas de violencia sexual, algunas/os han roto el silencio, otras/os no. Muchas/os detenemos nuestros estudios por falta de dinero para cubrirnos gastos en educación técnica o superior. Otras/os logramos aprender un oficio o culminar una profesión, pero el desempleo nos ataca. La delincuencia ha arrebatado muchas vidas y nos hace caminar por las calles “como que alguien nos persiguiera todo el tiempo”. 

A pesar de estos y otros males, nos organizamos, tenemos sed de aprender, queremos cambios para bien colectivo, estamos activas/os, reflexionamos juntas/os, nos damos fuerzas entre nosotras/os porque somos solidarias/os, tenemos más que duelos en común que nos unen y nos inspiran para que en nuestra historia se escriban hojas con otras vivencias, donde el enfoque basado en Derechos Humamos vaya de la mano de nuestras estrategias y campañas que promuevan cambios sociales y de comportamientos que nuestras sociedades necesitan urgentemente para mejorar sus condiciones de vida.