Collage de mis últimos meses

"Cuando el poder del amor sobrepase el amor al poder, el mundo conocerá la paz." 

Jimi Hendrix

En los últimos meses ... he sentido la frustración que produce caminar por la calle y que te falten el respeto porque no encajas en un modelo de masculinidad tradicional.

He vivido una revuelta provocada por el hastío del abuso de poder en el espacio que ha sido mi universidad ambulante. Una lucha que cansa y desgasta pero no se abandona. Los fantasmas mueven fichas de ajedrez al estilo Ortega, haciendo lo que sea para lograr pisotear a las/los que cuestionan, pero éstos/as siguen alzando su voz.

He trabajado y exigido mucho, y la paciencia por ratos la pierdo. Respiro, exhalo y trato de retenerla. He desconfiado, pero también me he esforzado en volver a confiar y ello ha fortalecido el trabajo con mi equipo.

He dormido ratos, no solo por trabajo, sino por naufragar en lecturas, pensamientos, en el chat, o porque una pesadilla me arrebata el sueño y no regresa con facilidad.

A pesar de lo apretado del tiempo no he dejado de compartir tertulias con mis amistades, ha sido la forma en la que nos perdemos juntos de este estresante mundo.

Tertulias en las que no hemos obviado la  rabia que sentimos al ver como el oportunismo hace de las suyas, montándose en una lucha de otros/as, sin la menor convicción de humanismo, buscando protagonismo ignorando el verdadero significado de “solidaridad”, pues lo único que les importa es el culto a la imagen. Vi lo suficiente para mantener firme mi postura. 

No fue nada agradable ver a feministas, activistas de DDHH, defensores/as del derecho que tiene la mujer a decidir sobre su cuerpo, defensores/as de una ley que proteja a las mujeres nicaragüenses de la violencia de género, celebrando misa y aplaudiendo al clero, un clero que a través de su intromisión en las leyes nicaragüenses ha sido cómplice en condenar a la muerte a nuestras hermanas, primas, sobrinas, madres, y pretenden obligarlas a que soporten la violencia de sus parejas porque las familias deben estar unidas,esa es la voluntad divina, sin importar que puedan matarlas, y aparte de eso, limitan el concepto de familia cuando las familias son diversas.

He de reconocer el esfuerzo de quienes si mostraron su apoyo a la lucha del adulto mayor sin esperar cámaras que le grabasen, que de la manera en que decidieron externar su apoyo, lo hicieron de corazón, sin importar riesgos.

Entre tanto de lo que ha pasado durante estos últimos meses, no quiero desencantarme, pero … los espacios y personas que me motivaron a organizarme, promover y luchar por el goce de DDHH en igualdad, esas personas y esos espacios hoy me muestran lo mismo que me muestra la iglesia, el orteguismo, la derecha, se critica el poder que administra otro, pero si estuviera en posición de administrador del poder, la historia no tuviera muchas variantes. Eso indigna mucho.

Creo que estoy tan loco, soy muy soñador, muy utópico que a pesar de todo lo que he vivido aun creo en los liderazgos transformadores y mientras hallan otras/os oprimidas/os en la misma onda, no quiero desencantarme por completo.